Valoración de los efectos diuréticos y los cambios en la concentración de aldosterona plasmática después de la administración oral de una dosis única de furosemida o azosemida en perros sanos.
Hori, Y., Katou, A., Tsubaki, M., Kanai, K., Nakao, R., Hoshi, F., Itoh, N., Higuchi, S.
Am. J. Vet. Res. 69, 1664-1669, 2008.
OBJETIVOS: determiner los efectos diuréticos y los cambios en la concentración de aldosterona plasmática (PAC) después de la administración oral de una dosis única de furosemida o azosemida en perros sanos.
Animales: 8 perros mestizos.
MÉTODO: se administró un dosis única de furosemida (2 mg/kg), azosemida (1, 5 o 10 mg/kg) o placebo (bifidobacterium 1 mg/kg) por vía oral (en un orden aleatorio a intervalos de 7 días) a cada perro (5 tratamientos por perro). Se recogieron muestras de sangre y orina antes (2 horas antes de la evacuación de la vejiga de la orina, basal) y a intervalos de 24 horas después de la administración del fármaco para valorar el volumen de orina y las variables bioquímicas plasmáticas y urinarias.
RESULTADO: comparados con los valores basales, el tratamiento con furosemida y azosemida (5 y 10 mg/kg), incrementaban el gasto urinario durante 1-2 horas y 2-4 horas, respectivamente. El volumen de orina en 24h y la excreción de sodio urinario se incrementó significativamente después de la administración de furosemida y azosemida (5 y 10 mg/kg), comparados con los de la administración de placebo; este incremento fue dosis dependiente para la azosemida e incremento similar para la furosemida y la dosis de 5 mg/kg de azosemida. Comparando con otros tratamientos, la excreción de potasio urinario en 24 h fue significativamente incrementada con la azosemida a 10 mg/kg. La azosemida en ambas dosis, aumentaba significativamente la concentración plasmática de proteína total y disminuye la concentración plasmática de potasio, comparado con los valores basales. Comparando con el efecto placebo, la PAC se incrementó significativamente por la furosemida y con una dosis de 10 mg/kg de azosemida.
CONCLUSIONES Y SIGNIFICADO CLÍNICO: en perros sanos, una dosis moderada de azosemida causó una acción diurética suficiente e incrementó la PAC en menor medida que la furosemida.