¿Tu gato es asustadizo? Te contamos cómo remediarlo
Si convives con un gato asustadizo seguro que te gustaría ayudarle a superar sus miedos.
En este artículo te contamos a qué puede deberse esta conducta, cómo puedes saber que tu gato está asustado y qué puedes hacer para que se sienta más seguro de sí mismo. ¡Sigue leyendo!
¿POR QUÉ ES MI GATO ASUSTADIZO?
Por su naturaleza desconfiada, es normal que te encuentres un gato asustadizo de forma puntual. Es común, por ejemplo, ante cambios de su entorno o situaciones inesperadas, como cuando llegan visitas, hay ruidos fuertes o se ha cambiado el mobiliario de la casa. En estas situaciones lo normal es que tu gato se esconda pero vuelva a la normalidad en cuanto desaparezca la situación que le ha asustado.
En otras ocasiones tu gato puede mostrarse asustadizo de forma constante. En este caso suele deberse a varios motivos:
Son gatos separados de sus madres antes de los 2 meses de edad.
Gatos que han vivido parte de su vida en la calle o en refugios y han tenido poco contacto previo con personas u otros animales.
Malas experiencias en el pasado, por ejemplo, malos tratos de anteriores propietarios.
La genética también influye. Si los padres eran miedosos es probable que tu gato lo haya heredado de ellos.
Socialización deficiente. El periodo de socialización es la época que va desde las 2 hasta las 8 semanas de edad y en la que el gatito conoce su entorno y aprende a interactuar con él, incluyendo otros gatos, personas y otros animales. Los gatos que han sido expuestos a pocas experiencias en esta época pueden volverse miedosos en su edad adulta.
¿CÓMO ACTÚA UN GATO ASUSTADIZO?
El gato pasa mucho tiempo escondido.
Apenas interactúa con los miembros de la familia.
Si lo que le da miedo se les acerca, se coloca con el cuerpo de lado, con las orejas hacia atrás, el lomo arqueado y la cola erizada.
Las pupilas se dilatan, bufa, y si no puede huir puede llegar a atacar.
Vocaliza de forma exagerada. El maullido suele ser agudo y constante.
¿CÓMO PUEDO AYUDAR A UN GATO ASUSTADIZO?
Es importante mostrarte lo más relajado posible ante un gato asustadizo. No grites en su presencia y evita movimientos bruscos o ruidos fuertes, porque podría asustarse aún más.
No trates de cogerlo, ya que podría intentar defenderse. Respeta sus tiempos sin forzarle a nada.
Prepara lugares en casa en los que se sienta seguro:
- Lugares en alto, tranquilos y sin ruido, desde los que pueda ver qué ocurre a su alrededor.
- Espacios donde pueda esconderse, como cajas o transportines.
- Deben ser lugares a los que el resto de habitantes de la casa no tengan acceso. Esto le dará la sensación de que controla la situación y puede huir cuando lo necesite.
Si conoces el origen de su miedo (otro gato, un perro o tú mismo, si lo acabas de adoptar) puedes tratar de desensibilizarlo:
- Se introduce el estímulo poco a poco y se retira en cuanto aparece el primer signo de miedo.
- Ofrece a tu gato algo de su comida favorita en presencia de ese estímulo para que empiece a asociarlo a algo positivo, y déjale que se tome su tiempo para acercarse, pero sin forzarle.
- Cada día intenta aumentar el tiempo de exposición a ese estímulo hasta que se cree una tolerancia. Hay que ir muy poco a poco y con mucha paciencia.
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En situaciones complejas puede ser necesaria la ayuda de un etólogo veterinario. Se trata de un especialista que trata las alteraciones de conducta en animales y te ayuda a reconducirlas. En situaciones muy graves puede ser necesario aplicar medicamentos como antidepresivos o ansiolíticos
