Brucelosis canina: causas y tratamiento
Quizás has oído hablar de la brucelosis canina. Se trata de una enfermedad bacteriana que puede afectar a tu mejor amigo y que, incluso, podría transmitirla. Si tu perro contrae la brucelosis canina podría padecer diferente síntomas, pero suele manifestarse con más frecuencia a través de alteraciones del sistema reproductivo. Si quieres saber más sobre esta enfermedad canina, sigue leyendo. En este artículo te contamos todo lo que debes saber sobre esta enfermedad, cómo se contagia, cuáles son los síntomas y el diagnóstico y tratamiento.
QUÉ ES LA BRUCELOSIS CANINA
Como ya hemos apuntado se trata de una enfermedad causada por diferentes especies de bacterias que pertenecen al género Brucella. Concretamente, se trata de la bacteria Brucella canis. Sin embargo, también pueden causar la enfermedad las bacterias que causan brucelosis en otras especies animales:
B. melitensis, que afecta al ganado ovino y caprino; también produce la mayoría de los casos de brucelosis que afectan a personas.
B. abortus, propia del ganado bovino.
B. suis, que afecta a los cerdos.
¿CÓMO SE TRANSMITE?
Entre los perros, la brucelosis se transmite por vía oral, nasal, conjuntival o sexual. Es decir, si tu perro interactúa con los fluidos corporales de un perro infectado se contagiará de brucelosis.
Es decir, los perros pueden infectarse al compartir actividades propias de las relaciones sociales y reproductivas. Del mismo modo, las personas pueden contagiarse si entran en contacto directo con las secreciones de un perro infectado.
Síntomas de la brucelosis canina
Estos son los principales síntomas que produce la brucelosis canina y que podría sufrir tu perro si contrajese la enfermedad:
Unos de los síntomas más usuales son los que tienen que ver con el aparato reproductor, tanto en el caso de los machos como las hembras. También puede provocar abortos y la muerte de los fetos.
En el caso de las hembras, la brucelosis canina puede provocar abortos espontáneos en estados de gestación avanzados. También provoca secreciones vaginales que tienen muy mal aspecto. Si los cachorros llegan a término, podrían nacer enfermos o muy débiles, incluso podrían no sobrevivir.
En el caso de los machos, los síntomas podrían ser: inflamación de los testículos, atrofia testicular, prostatitis o infertilidad.
Inflamación de los ganglios linfáticos.
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Además de los mencionados, esta enfermedad puede provocar otro tipo de alteraciones en el organismo: artritis, inflamación de los discos intervertebrales que pueden provocar cojeras, incluso problemas oculares, letargia, fiebre…
Cabe señalar que algunos perros podrían ser asintomáticos. Por otro lado, la mortalidad es muy poco probable, a excepción de los neonatos o perros que tienen el sistema inmune deprimido.
¿CÓMO SE DIAGNOSTICA?
Si observas alguno de los síntomas descritos, te recomendamos que acudas de inmediato a la consulta de tu veterinario. La observación de dichos signos clínicos harán que el facultativo sospeche de la brucelosis canina.
Sin embargo, para hacer el diagnóstico será necesario tomar muestras de los ganglios linfáticos, el útero, la médula ósea, la próstata… Además, hará unas pruebas serológicas para detectar anticuerpos, en el caso de las hembras una citología, etc.
TRATAMIENTO DE LA BRUCELOSIS CANINA
Una vez que el veterinario confirme el diagnóstico propondrá el tratamiento para esta enfermedad. Consiste en una terapia que combina varios antibióticos específicos.
Este tratamiento podría durar hasta 3 semanas y podría variar en función de cada caso concreto. A pesar de los antibióticos, no siempre puede garantizarse la desaparición total de la bacteria del organismo del perro. Es decir, que podría darse el caso de que el perro esté enfermo de manera persistente o sufrir recaídas cada cierto tiempo.
Además del tratamiento para tratar de curar la brucelosis canina, a modo de prevención la castración y la esterilización podrían ser un remedio bastante eficaz para evitar la propagación de la enfermedad.
Como has podido comprobar, la brucelosis canina podría tener graves consecuencias para tu perro. Por lo que si observas alguno de los síntomas descritos, lo mejor es que acudas cuanto antes a la consulta de tu veterinario. Dado que se puede contagiar al entrar en contacto con las secreciones de un perro infectado, es muy importante mantener una correcta higiene. Procúrale a tu perro todos los cuidados necesarios para prevenir el contagio.
