Perros y gatos juntos: consejos para una buena convivencia

¿Ya tienes un perro en casa y te gustaría tener un gato, o viceversa? Si esa es tu intención pero te preocupa que no se lleven bien, no te preocupes. Tu perro y tu gato pueden llegar a ser buenos amigos.

Es más que probable que hayas escuchado alguna vez que dos personas se llevan como el perro y el gato. Es decir, que ¡se llevan fatal! Así que no es de extrañar que más de uno se pregunte si perros y gatos juntos pueden convivir. La buena noticia es que sí y en este artículo vamos a darte algunos consejos para que tu perro y tu gato se lleven bien desde el minuto uno.

PERROS Y GATOS JUNTOS: ¿CÓMO LOS PRESENTO?

La primera impresión siempre es importante y tu papel consistirá en preparar el camino. En el caso de los perros y gatos juntos, lo mejor que se conozcan siendo cachorritos. Es una buena idea, también, preparar a conciencia el encuentro y acondicionar un espacio en el que ambos se sientan cómodos. Y, sobre todo, ¡no pierdas la paciencia! Es un proceso gradual y ya se sabe que las prisas no son buenas. Te contamos algunos trucos para preparar este momento.

Lo ideal es que ambos se conozcan cuando son cachorros

Si el gato y el perro son cachorros será mucho más fácil que se adapten el uno a otro. Si crecen juntos, incluso puede que lleguen a ser grandes compañeros de juego, pues han aprendido a interpretar las señales del otro. Por eso, presentar a perros y gatos cuando son cachorros puede facilitarte mucho la convivencia.

Qué hacer si se conocen cuando cualquier de los dos ya no está en la etapa juvenil

Si tu perro y gato se conocen cuando ya no son cachorros, no te preocupes, no está todo perdido. Si han socializado con otros perros y gatos, y hay tenido buenas experiencias, será mucho más fácil que se adapten. Debes tener en cuenta, también, el carácter de cada uno de ellos. Y, por último, si son territoriales o tienen muy desarrollado el instinto de caza, la convivencia puede complicarse. En este caso, solo necesitarás dedicar más tiempo y paciencia para que se adapten.

Preséntalos poco a poco

Poner a perros y gatos juntos debe hacerse despacio. Sigue estos pasos para asegurarte una convivencia exitosa:

  • Déjalos en habitaciones separadas y enséñale a cada uno un trapo con el olor impregnado del otro. Por lo general, el perro mostrará interés; en cambio el gato es más desconfiado y no se interesará demasiado.

  • En el momento en que veas que ambos están tranquilos con el olor del otro, ha llegado el momento de dejar que se vean. Pero, por el momento, de lejos.

  • Si los ves relajados, puedes pasar a la presentación oficial.

    • Antes de dejar que interactúen, saca a tu perro a dar un paseo y juega con él. Soltar energía hará que esté más relajado y receptivo para conocer a tu gato.
    • Prepara al gato también para el momento. Córtale las uñas para evitar que se hagan daño.
    • Mantén al perro con correa para controlarlo mejor. Probablemente, solo querrá acercarse a oler al gato; pero algunos perros se ponen un poco ansiosos y el gato puede asustarse. Lo importante, también, es que tú estés tranquilo, de no ser así, ellos pueden sentir tu nerviosismo y contagiarse.

  • Bajo ningún concepto los obligues a acercarse u olerse. El éxito de perros y gatos juntos pero no revueltos es que tengas paciencia. Dales tiempo y espacio, quizás no lleguen a ser amigos, pero aprenderán a respetarse y vivir en armonía.

     

LA IMPORTANCIA DEL ESPACIO PARA CADA UNO

Si quieres a tus perros y gatos juntos es imprescindible que dispongan de su propio espacio. Evita que tengan que competir por recursos como la cama, la comida o el agua. 

Un buen truco es colocar los bebederos y comederos del gato en lugares altos a los que él pueda acceder con facilidad, pero el perro no. El gato comerá tranquilo sabiendo que el perro no le quitará la comida, pero tampoco dejes que se acerque al perro mientras este come. Lo último que quieres es que se enfade y crea que tiene que defender su comida.

Coloca la bandeja con arena de tu gato en un lugar tranquilo al que tu perro no pueda acceder. Es importante que el gato tenga privacidad para hacer sus necesidades.

Otro aspecto que debes cuidar es el de los espacios altos y escondrijos que necesita tu gato para sentirse seguro. 

Fomenta una relación positiva entre perros y gatos juntos

Dedícales tiempo a ambos. Ofréceles premios y caricias cuando tanto uno como otro estén cerca de ti. De este modo, el otro verá que acercarse es positivo y beneficioso.

Es necesario que les presten atención a ambos y respetes su espacio y su forma de ser.

Como ves, convivir con perros y gatos juntos es posible. Aunque es todo mucho más sencillo si ambos se conocen cuando son cachorros o han tenido experiencias previas de socialización con otros perros y gatos, con tiempo y paciencia puedes lograr que se respeten. Sin embargo, si crees ya has dedicado suficiente dosis de ambos recursos y no se llevan bien, consulta con un etólogo. Este especialista en comportamiento canino y felino te ayudará a mejorar su relación.

Artículos que te
pueden interesar