¿Qué debes saber sobre los áscaris en perros?

Como ya sabes, desparasitar a tu compañero es esencial para mantenerlo sano y protegido frente a un buen número de diminutos organismos que pueden afectar a su salud. Pues bien, los áscaris en perros son uno de los parásitos internos más comunes. ¿Quieres saber más sobre ellos?

¿QUÉ SON LOS ÁSCARIS EN PERROS?

Los áscaris en perros son gusanos que se suelen localizar en el intestino delgado, aunque también pueden migrar a los pulmones y a otros órganos y tejidos. Cuando son adultos, estos parásitos recuerdan a un espagueti, ya que son redondos, de color blanquecino y pueden llegar a medir hasta 15 cm de largo. 

Aunque pueden afectar a perros de cualquier edad, son más comunes en los cachorros, a los que además pueden provocar síntomas más graves. 

Además de ser muy habituales en perros y gatos que no son desparasitados regularmente, los áscaris también pueden transmitirse a las personas, especialmente a los niños. Este tipo de contagio suele darse a través de cachorros, adultos o huevos que se encuentran en un ambiente infectado.

CÓMO SE TRANSMITEN LOS ÁSCARIS EN PERROS

Los áscaris en perros tienen tres formas principales de transmitirse:

  • Por vía oral. Tanto los perros adultos como los cachorros y las personas pueden infectarse al ingerir huevos, a través de suelos y pelaje contaminado.

  • null

     

     

    A través de la placenta o durante la lactancia. Los cachorros pueden contagiarse antes de su nacimiento, a través de la placenta, o durante la lactancia, a través de la leche materna. 

     

  • Al ingerir hospedadores intermedios. Existen animales, como roedores, conejos, ovejas, cabras, aves, lombrices de tierra, etc., que no se ven afectados por estos parásitos pero los transportan. Cuando un perro ingiere estos hospedadores infectados, las larvas quedan libres en su intestino.

     

SIGNOS Y SÍNTOMAS DE ÁSCARIS EN PERROS

La gravedad y la intensidad de los síntomas provocados por áscaris en perros depende de la edad y del sistema inmunitario del animal, así como de la cantidad y localización de los parásitos. 

Los perros adultos parasitados no suelen tener problemas graves, pero deben tratarse igualmente, entre otras cosas, porque son una importante fuente de contagio. Los cachorros sí pueden manifestar síntomas graves, especialmente aquellos con cargas parasitarias elevadas, e incluso pueden llegar a morir.

Los posibles síntomas de áscaris en perros son estos:

  • Dilatación y dolor abdominal

  • Heces blandas o líquidas acompañadas de moco y/o sangre

  • Anemia y respiración acelerada

  • Tos y descarga nasal

  • Intranquilidad

  • Mal estado general (delgadez, desnutrición, pelo hirsuto e incluso raquitismo)

  • Presencia de gusanos en los vómitos y las heces

  • Obstrucciones y perforaciones intestinales

PREVENCIÓN DE LOS ÁSCARIS EN PERROS

Las desparasitaciones rutinarias de cachorros y perros adultos son la forma de prevenir los áscaris en perros. En los cachorros, el tratamiento preventivo debe iniciarse a las dos primeras semanas de vida. A partir de ahí, ha de repetirse con una frecuencia quincenal hasta dos semanas después del destete y, después, mensualmente hasta los seis meses de edad.

A partir de los seis meses y durante toda la vida de los perros adultos, los antiparasitarios contra gusanos se administran cada 3 meses, es decir, cuatro veces al año. Dicho esto, el veterinario puede recomendarte una desparasitación más frecuente, cada 1 o 2 meses, dependiendo de los factores de riesgo de tu perro (si está en contacto con otros animales, si vive en el exterior, si caza para alimentarse…).

Las hembras en periodo de lactación también deben ser desparasitadas a la vez que la camada para evitar el contagio a través de la leche.

Es fundamental que lleves a cabo ciertas medidas higiénicas para reducir la contaminación ambiental por huevos.

TRATAMIENTO DE LOS ÁSCARIS EN PERROS

Para tratar los áscaris en tu perro deberás administrarle el antiparasitario que te indique tu veterinario. A parte, dependiendo del estado de salud de tu compañero, especialmente si es un cachorro, es probable que necesite otros tratamientos de soporte para recuperarse, incluyendo una alimentación adecuada y equilibrada.

Además, es fundamental que lleves a cabo ciertas medidas higiénicas para reducir la contaminación ambiental por huevos:

  • Elimina o recoge diariamente las heces del suelo y mantén las zonas limpias.

  • Evita, en la medida de lo posible, que tu perro coma posibles hospedadores de estos parásitos.

  • Mantén a tu compañero alejado de las heces de otros perros.

El control de los áscaris en perros es fundamental, ya sea mediante las pautas de desparasitación recomendadas o realizando análisis coprológicos mensuales o trimestrales en función de los factores de riesgo que hemos comentado. Si tienes alguna duda sobre cómo prevenir o tratar este tipo de gusanos, no dudes en preguntar a tu veterinario.

Artículos que te
pueden interesar