VT_detail.jpg VT_detail.jpg
  • Tiempo de lectura: 1 mins

    Utilidad de la administración por vía oral de una solución de azucares combinados para evaluar la absorción y permeabilidad intestinal en los gatos

    Am J Vet Res 2001;62:111-118. Johnston KL, Ballevre OP, Batt RM

    Am J Vet Res 2001;62:111-118.

    Johnston KL, Ballevre OP, Batt RM

    Objetivo: Evaluar la permeabilidad y la absorción intestinal en gatos sanos en asociación con la dieta y con la microflora intestinal normal.

    Animales: 6 gatos comunes sanos.

    Procedimiento: Una solución de azúcar que contenía D-xilosa, 3-0-metil-D-glucosa, L-ramnosa, lactulosa y 51Cr-EDTA fue administrada intragástricamente a gatos sanos y se determinó la excreción urinaria de los azúcares administrados a las 5 horas de la ingesta. Después, los mismos gatos recibieron metronidazol durante 1 mes y se repitió el estudio. Otro estudio final fue realizado mientras a los gatos se les mantenía con dietas distintas, en composición y procesado.

    Resultados: Los ratios de lactulosa/ramnosa, que reflejan la permeabilidad intestinal, era alta en los gatos, comparada con los valores en los humanos y los perros, y los valores obtenidos antes y después de la administración de metronidazol no presentaban diferencias significativas. La absorción intestinal tampoco fue alterada después de la administración del antibiótico, y el ratio xilosa/glucosa fue 0.70 /- 0.03 antes y 0.71 /- 0.06 después de la administración del metronidazol. La recuperación de los azúcares no variaba significativamente tanto si los gatos se alimentaban con comida húmeda como si lo hacían con comida seca.

    Conclusiones y relevancia clínica: Se establecieron los rangos de referencia para el porcentaje de recuperación urinaria de la administración oral de D-xilosa, 30-metil-D-glucosa, L-ramnosa, lactulosa y 51Cr-EDTA obtenidos cinco horas después de la ingesta en gatos sanos. El intestino de los gatos parece ser más permeable que el de otras especies, aunque la microflora bacteriana normal no parece influir en la integridad o en la función del intestino felino, ya que los valores obtenidos para medir las variables antes y después de la administración no diferían significativamente. Además, las diferencias no se detectaron cuando la dieta fue completamente alterada.