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    Evaluación ecográfica de los cistoadenomas biliares en el gato

    Nyland TG, Koblik PD, Tellyer SE. Vet Radiol Ultrasound; 1999 40: 300-306.

    Nyland TG, Koblik PD, Tellyer SE.

    Vet Radiol Ultrasound; 1999 40: 300-306.

    Objetivo: Describir la apariencia ecográfica de los cistoadenomas en gatos y comparar los hallazgos a una forma poco habitual de tumores hepáticos humanos. Los cistoadenomas biliares son tumores hepáticos benignos poco comunes que aparecen en gatos gerontes y que pueden como lesiones quísticas focales o multifocales en el hígado.

    Animales: La mediana de edad en los gatos afectados era de 13.3 años (entre 10 y 16 años). Ocho gatos eran machos castrados y dos eran hembras castradas.

    Procedimiento: Se revisaron los historiales de 10 gatos con diagnóstico ecográfico abdominal y histológico de cistoadenoma biliar.

    Resultados: En tres gatos los tumores no se observaron en la ecografía por tener un tamaño muy pequeño o porque habían sido oscurecidos por reverberaciones de campos cercanos. Los otros siete gatos tenían masas solitarias (4 gatos) o multifocales (3 gatos) correspondientes a patrones ecográficos variables: masas multioculares conteniendo quistes de paredes finas, masas hiperecóicas con componentes quísticos, o masas de ecogenicidad mixta con componentes quísticos. Las masas tenían patrones ecográficos variables cuando se presentaba la enfermedad multifocal. Los quistes reconocibles eran evidentes en alguna parte de los tumores observados ecográficamente, aunque en ocasiones los quistes aparecían muy pequeños.

    Conclusiones: Se creía que los cistoadenomas biliares son clínicamente silentes. Aunque en cuatro gatos se palpaba hepatomegalia o una masa abdominal craneal, ni el curso de los signos clínicos, ni el hematocrito o las alteraciones bioquímicas pudieron ser atribuidas directamente al cistoadenoma biliar. El tratamiento de elección es la resección quirúrgica del tumor ya que su continuo crecimiento podría comprimir las estructuras vitales adyacentes al hígado. Los cistoadenomas biliares deben ser incluidos en el diagnóstico diferencial de otras lesiones quísticas hepáticas como los quistes hepáticos, hematomas, abscesos o quistes parasitarios u otros tumores hepáticos.